Desde los sindicatos a la patronal, pasando por las asociaciones de consumidores y las fuerzas políticas, las críticas a la subida de impuestos son generales.
Las críticas a los presupuestos del Estado y su confirmada subida de impuestos suscitan un rechazo casi unánime en los agentes sociales. Ni siquiera el coordinador de IU, Cayo Lara, está contento con la subida propuesta por el Gobierno: él lo haría de otra manera.
Lara ha asegurado ante el Consejo Ampliado de IU en Andalucía, que "menos impuestos es más crisis y más paro; menos impuestos es más derecha", a la vez que recordó que la actual crisis se ha producido "con menos impuestos del Estado y con menos Estado", contra las tesis del PP y del PSOE.
Lara, que dijo del PSOE y del PP que "parecen el Dúo Dinámico" porque "si no la misma música sí que tienen la misma melodía", abogó por bajar los impuestos en un 25%a los "mileuristas", que suponen el 65% de las personas con retribución, de congelárselos a la clase media y de incrementárselos un 5% a los más ricos y a los que perciben más de 60.000 euros en nómina.
Para los que perciben a partir de esa cantidad pidió incrementar el tipo impositivo del 43% al 50%, que las rentas del capital no paguen un fijo del 18% sino según la tabla del IRPF, y que las sociedad de inversión de grandes capitales o SICAV incrementen el 1% que pagan de sus beneficios.
También que se restaure el impuesto de patrimonio, que se establezca una fiscalidad verde, que no suba el IVA sino para los artículos de lujo y que se combata la economía sumergida, de la cual señaló que se incrementa con medidas como las de los 420 euros para los parados, porque con esa cantidad consideró que no vive una familia "y se tendrá que buscar la vida".
Frente a medidas como ésa, Lara propuso un Plan Nacional de Empleo con retribuciones de 700 euros, cinco horas laborales y dos horas de formación, lo que acabaría con un millón de parados, a la vez que recordó que el salario mínimo en España es de 624 euros, en Italia de 800 y en Francia de 1.321, momento en el que bromeó con las previsiones de José Luis Rodríguez Zapatero de superar la renta de Italia y Francia.
Frente a 3,6 millones de parados, un aumento de la economía sumergida del 30%, 300.000 autónomos menos y un millón de viviendas sin vender, Lara calificó de "indecencia e inmoralidad" que la banca haya ganado más el primer semestre de este año, en plena crisis, que en el mismo periodo de 2008.
Lara hizo "corresponsables de la crisis" a los Gobiernos del PP y del PSOE, por haber optado ambos por el modelo de "más mercado y menos Estado, por haberle quitado músculo al Estado y por haberlo adelgazado".
Según Lara, a las dos reformas fiscales regresivas del PP y a la venta por parte de esos Gobiernos de empresas públicas "que tienen beneficios por un tubo", hay que sumar que Rodríguez Zapatero "presuma" de que las arcas públicas hayan dejado de percibir 20.000 millones de euros con su gestión.
Lara, que bromeó diciendo que el socialismo se consigue con sus propuestas "y no sólo metiendo un pin republicano en la Zarzuela", ironizó con el acto del PP previsto mañana en Dos Hermanas (Sevilla): "Los señoritos del PP vienen a Dos Hermanas a defender a los trabajadores de los ataques de los manijeros que los gobiernan".
"Enmienda a la totalidad"
Rosa Díez, diputada de UPyD, señaló que las cuentas públicas merecen una "enmienda a la totalidad" y calificó de "meros parches, inconexos e incoherentes" las nuevas medidas impositivas.
Para el portavoz del BNG en el Congreso, Francisco Jorquera, el proyecto de ley es "un mal punto de partida" para recabar apoyos parlamentarios y consideró que subir los impuestos grava el consumo y tendrá un efecto negativo sobre la demanda en el actual contexto de crisis.
El secretario general de ERC, Joan Ridao, advirtió al Gobierno de que "deberá esforzarse mucho si quiere obtener apoyos" porque el proyecto de Presupuestos para 2010 es "antisocial" e "hipoteca" la recuperación económica.
La subida de impuestos tampoco se libró de las críticas de la patronal, CEOE, puesto que la considera perjudicial para el consumo y cree que afectará especialmente al turismo y al comercio, aunque valoró la eliminación de la deducción de los 400 euros del IRPF.
Para los sindicatos, la subida de impuestos afectará especialmente a las rentas del trabajo. CCOO cree que la mayor carga de la reforma impositiva volverá a recaer en los trabajadores en vez de en las rentas más altas, al tiempo que afirmó que está "justificada" una mayor presión fiscal para mantener las prestaciones sociales, recuperar la actividad económica y aumentar los ingresos del Estado.
Por su parte, UGT calificó de "insuficiente" y "tímido" el paquete de medidas fiscales que contempla el proyecto de ley, aunque valoró que las cuentas se "orienten" hacia la reactivación económica y la cohesión social. Los autónomos de ATA consideran que una subida de impuestos lastrará la actividad económica y conllevará más cierres de negocio y del paro.
También las asociaciones de consumidores y usuarios FACUA y ADICAE criticaron el proyecto porque creen que la subida del IVA afectará a las economías más débiles
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