03 julio 2012

EMBLEMAS HERÁLDICOS QUE DEBEN FIGURAR EN EL ESCUDO DE LOS HINOJOSOS.

La Consejería de Administraciones Públicas, a petición del ayuntamiento de Los Hinojosos, por Decreto 115/2005 de 27 de septiembre, BOCM de 27 de diciembre, núm. 260, resolvió aprobar su Escudo de Armas, y otorgar la Bandera Municipal a Los Hinojosos y, con las siguientes descripciones:

“Escudo español partido: Uno, en campo de plata, la cruz de la Orden Militar de Santiago, de gules; en campo de gules, una corona de marqués; al timbre corona real española”.

“Bandera de proporciones 2:3, distribuida por mitad vertical; en la primera mitad junto al asta, blanco, y en la segunda mitad, hacia el batiente, rojo; en el centro de la mitad de color blanco, irá estampado el escudo municipal.

ESCUDO ACTUAL

EL ayuntamiento de Los Hinojosos propuso la aprobación de este escudo a la Consejería de Administraciones Públicas de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, desoyendo el informe, no vinculante, de la Real Academia de la Historia.

Informe emitido por la Real Academia de la Historia sobre el escudo de armas de Los Hinojosos según consta en su Boletín Oficial, Tomo CCII, Número III, año 2005

Los Hinojosos. (Cuenca).
ESCUDO Y BANDERA

La forma plural del topónimo se debe a la existencia de dos jurisdicciones señoriales, una la Orden de Santiago, y otra de la casa de Villena Escalona. Esta circunstancia se ha querido recordar en el escudo de armas proyectado mediante la cruz espada de los caballeros de Santiago y una corona de tres florones.
Es evidente que una corona de este tipo que modernamente se asigna como timbre de sus armas a los titulares de un marquesado, no representa precisamente al de Villena; en todo caso, a uno cualquiera o, mejor, genéricamente a esa categoría nobiliaria. Para recordar en un escudo de armas a la casa de Villena Escalona debe recurrirse, naturalmente, a los emblemas heráldicos que distinguen a este linaje.
Por otra parte, si bien modernamente la cruz espada se acepta como emblema de la Orden de Santiago, es un uso carente de apoyo histórico. La cruz espada era el distintivo usado por los caballeros de la Orden, mientras que los estandartes, sellos, etc. aparecía el emblema propio de la Orden toda: la cruz floronada cantonada (o cargada) de veneras. También hoy se ha asignado a la cruz espada significaciones más desatinadas: el Apóstol Santiago, la ciudad de Compostela, toda Galicia…, nacidas de la ignorancia y propiciadoras de la tergiversación, no debemos aceptarlas.
En la bandera aparece el escudo de armas rechazado, por lo que deberá prepararse otro proyecto que evite los inconvenientes señalados. Faustino Menéndez Pidal. (24 Junio 2005.

Para evitar estos inconvenientes remití en su día al Ayuntamiento un escrito solicitando la modificación del escudo actual, acompañado de una detallada memoria histórica del pueblo y el diseño de un nuevo escudo

Memoria Histórica abreviada de Los Hinojosos

En el año 1241, Gonzalo Ibáñez, Obispo de Cuenca, por mandato del rey don Fernando III, cerró la línea fronteriza entre los Concejos de Alarcón y de Uclés, desde la Sierra de Almenara hasta las Mesas. Estableció una serie de mojones a lo largo del territorio comprendido entre el extremo sur de la citada Sierra y el lugar de Fuentelespino: la peña con que concluye esa Sierra; el collado que había en el comienzo del camino de Hontanaya a Gúzquez; el comienzo del camino de Hotanaya a El Hinojoso; el pozo de El Hinojoso; el pozo de El Aljibe; y, finalmente, la Fuente del Espino. Tomó como línea fronteriza el camino que unía las poblaciones de Hontanaya, El Hinojoso, Puebla del Aljibe y las Mesas, y determinó que recorrida la línea divisoria de Norte a Sur, el territorio situado a la derecha sería de Uclés, y el de la izquierda, de Alarcón.

El Hinojoso quedó dividido en dos zonas al ser atravesado por el camino fronterizo: una pasó al Concejo de Alarcón y la otra, al Concejo de Uclés de la Orden Militar de Santiago, dando origen a dos municipios independientes, conocidos históricamente, como El Hinojoso del Marquesado y El Hinojoso de la Orden, separados por una calle de unos cuarenta pies de ancho.

El Hinojoso del Marquesado

El Hinojoso el Marquesado hasta la derogación definitiva de los señoríos jurisdiccionales por la reina regente, doña María Cristina, previa aprobación por las Cortes, en las leyes del 20 de enero de 1837 y 23 de agosto de 1837 e incluso posteriormente por otro decreto del 31 de agosto de 1841 promulgado por Espartero. Cuando en este último año, don Francisco Cea Bermúdez creó un estado centralizado dividido en 49 provincias, El Hinojoso del Marquesado pasó a la jurisdicción de la provincia de Cuenca y de su Diócesis.

El Hinojoso de la Orden

El Hinojoso de la Orden dependió en lo eclesiástico, del Obispado Priorato de Uclés, vere nullius, y en lo civil de la jurisdicción de la provincia de La Mancha. Disuelta por el Real Decreto de 30 de noviembre de 1833 (reforma territorial de Javier de Burgos), El Hinojoso de la Orden fue agregado a la provincia de Cuenca, pero en lo eclesiástico, siguió dependiendo del citado Obispado Priorato, hasta que en 1873, al ser disueltas las órdenes militares, fue agregado a la Diócesis de Cuenca (arciprestazgo de Belmonte), según el mandato del papa Pío IX (Bula “Quo Gravius”, publicada el 4 de junio de ese mismo año).

Con la ordenación territorial de Floridablanca (1775), fueron agregados a la provincia de la Mancha, los pueblos de la Orden Militar de Santiago de la Mesa Maestral de Quintanar, entre los que se encontraba El Hinojoso de la Orden. Así pasó a depender, en lo civil, de la jurisdicción de la provincia de la Mancha, y en lo eclesiástico, del Obispado Priorato de Santiago de Uclés, vere nullius.
Por razones históricas, en el nuevo Escudo deben estar presentes los emblemas en el escudo que distinguen el linaje de la cada Villena Escalona por el entronque de los Pacheco con los linajes de Girón y de Acuña., linajes a los que pertenecía don Juan pacheco, al ser hijo de María Pacheco, descendiente del portugués Fernando Pacheco, primer miembro conocido de este linaje, y de Alfonso Téllez Girón y Vázquez de Acuña, descendiente, a su vez, de Vaco Núñez de Acuña y de uno de los magnates más ricos y poderosos de la Edad Media, don Rodrigo González Girón

ESCUDO PROPUESTO
Descripción:
Escudo mantelado. 1º, en campo de plata, dos calderas endentadas en faja de jirones y cuñas, de oro y gules, una sobre otra, con tres serpientes de oro saliendo de cada lado de las asas, una hacia adentro y dos hacia fuera (Pacheco). 2º, en campo de sable, una banda de oro cargada en el centro de un escudete de gules y sobrecargado con una cruz floreteada y hueca de plata, y en los costados, de nueve cuñas de azur, cinco en el diestro y cuatro en el siniestro; bordura de plata con cinco escudetes de azur cargados de cinco besantes de plata puestos en aspa (Acuña). Mantel de oro con una cruz floronada de gules cargada de cinco veneras de plata (Orden de Santiago). Al timbre, coronal real cerrada.
ORIGEN DE LOS EMBLEMAS HERÁLDICOS QUE DISTINGUEN EL LINAJE DE LA CASA VILLENA ESCALONA.


EMBLEMA DE LOS PACHECOS

Las armas primitivas del linaje proceden de Portugal: en campo de oro, conos calderas de sable puestas en palo, cargada cada una de tres fajas endentadas, o gironadas, de oro y gules y gringoladas de sinople. O sea, con cuatro cabezas de serpiente en el asa, dos a cada lado


En España pintaron el campo de ese escudo, de plata, con las dos calderas endentadas, o gironadas, de oro y gules en dos órdenes y gringoladas de sinople, poniendo seis cabezas de serpiente en el asa, cuatro a cada lado.

Muchas linajudas familias de los reinos españoles traían por armas un par de calderos. Estos calderos indicaban, en los siglos XII y XIII, que el poseedor de estas armas era “capitán de mesnada”, y que tenía tal abundancia de dinero que podía permitirse, como el rey, tener ejército, y sobre todo alimentarlo. Normalmente se dispusieron dos calderas en los escudos por una simple cuestión estética. Resultaban más armoniosas que sólo una.

¿De donde provinieron las serpientes?
Dibujo del libro de don Eduardo Pardo de Guevara. 
Las serpientes no eran otra cosa que los adornos de los remaches del asa de las calderas. Posteriormente se llegó al absurdo de enumerar las serpientes que adornaban la caldera, y el pintor posterior se vio obligado a dibujarlas saliendo de su interior.


Escudo de Armas de don Juan Pacheco .

Don Juan Pacheco, como Marqués de Villena y Duque de Escalona, acrecentó el escudo de su linaje con las armas de los Acuña, al cual pertenecía ser hijo de la Señora de la villa de Belmonte, María Pacheco, y de Alfonso Téllez Girón y Vázquez de Acuña, nieto del conde de Valencia de don Juan, el portugués Martín Lope y Vázquez de Acuña.

Emblemas de los Acuña

El linaje Acuña se origina en el lugar de Acuña Alta, en la Sierra de la Estrella en Portugal. El tronco de este linaje en Fernando Páez (Peláez), hijo de don Pelayo Gutiérrez, Señor de la Quinta y Torre de Silva, en el lugar de Acuña, por lo que su descendencias toma el apellido Acuña.

Las primitivas armas, concedidas a Pay Gutiérrez de Acuña, por el Rey don Alfonso I de Portugal, fueron: En campo de oro, nueve cuñas de azur.


Los Acuñas de Teverga (Asturias) y en otros puntos, descendientes de Fernán Páez, Señor de Acuña Alta en Portugal, nieto de Gutierre Peláez, Señor del Páramo de la Foncella, y de los descendientes de Lope Vázquez de Acuña, hermano menor del Martín, y de su mujer, Teresa Carrillo de Albornoz, entre los que figuran los Condes de Buendía, ostentan este escudo: En campo de oro, nueve cuñas de azur, con las puntas hacia abajo, colocadas en tres fajas; bordura de plata con cinco escudetes de azur, cargados de cinco bezantes de plata, puestos en sotuer, que son las armas Reales de Portugal.

Los Acuña descendientes de don Martín Vázquez de Acuña y de su mujer la Infanta doña María de Portugal, Señora de Valencia de don Juan, entre los que figuran los Condes y Duques de Valencia, traen las siguientes armas: En campo de sable, una banda, de oro, cargada en el centro de un escudete de gules, sobrecargada de una cruz flordelisada, de plata, y acompañando dicho escudete, de nueve cuñas de azur; cinco a su lado derecho y cuatro a su izquierdo. Bordura de plata, con cinco escudetes de azur, cargados de cinco bezantes de plata, puestos en sotuer, que son las armas Reales de Portugal.


La cruz floreteada o flordelisada, hace referencia a un doble símbolo: La cruz representa a Jesucristo. Los extremos acabados en flores de lis representan a María Santísima,


Los cinco escudetes de la bordura de las arma, proceden del escudo de Portugal. Según una leyenda, los escudetes representarían a los cinco reyes moros derrotados por el primer rey de Portugal, Alfonso Enríquez, en la batalla de Ourique (26 de julio de 1l39).
Cada escudete está cargado con cinco bezantes de plata (puntos blancos), puestos en aspa. Son las llamadas quinas de Portugal, las cuales hacen referencia a una leyenda relativa al citado monarca: Antes de la citada batalla de Ourique, cuando el rey rogaba por el pueblo portugués, se le apareció Jesús en la cruz. El rey ganó la batalla y, como muestra de gratitud, incorporó las cinco llagas de Cristo (los estigmas) en su bandera. Contando los puntos y los escudos suman treinta: las treinta monedas que Judas recibió por delatar a Cristo.

Emblemas de los Girón

Escudo de los Girón

El cronista e historiador español Vargas, del siglo XVI, en su obra Discursos de la Nobleza Española cuenta lo siguiente:
El conde Don Rodrigo González de Cisneros, por aquella hazaña de haber dado su caballo al rey don Alfonso VI y haberle quitado un girón (jirón) de los faldones, ganó el alcuña (sobrenombre) de "Girón" y dio al olvido su apellido de Cisneros, y sus descendientes, conservando el alcuña de Girón, tienen grandes solares, como lo vemos en la ilustrísima casa del Duque de Osuna, y otras de que hizo historia particular el doctor Gudiel.
El suceso de que habla el escritor Vargas está comprobado históricamente. Sucedió que a finales del siglo XI el rey de León y de Castilla Alfonso VI dio un gran avance a la Reconquista. En el año 1083 tomó Madrid a los moros, que era una avanzadilla de Toledo, ciudad que tomó dos años después en 1085. En una de las batallas que se dieron para la conquista de esta ciudad, el caballo del rey cayó muerto. El rey se vio a pie y desamparado, cuando acudió en su ayuda el caballero don Rodrigo González de Cisneros quien desmontando de su propio caballo se lo entregó a Alfonso, al mismo tiempo que cortaba 3 jirones de su sobrevesta, para que sirvieran de prueba irrefutable y se pudiera demostrar más tarde que había sido él quien le había auxiliado con peligro de sus propia vida.
Después de terminada la contienda, el rey agradecido premió su gesta y le concedió sustanciosas mercedes. Uno de los premios fue el derecho a tomar el nombre de jirón (más tarde sería registrado como girón) y poner sobre sus armas el dibujo de 3 jirones. El caballero de los 3 jirones contrajo matrimonio con doña Sancha, hija del rey Alfonso VI.
Con el tiempo se otorgaría a este linaje el título de conde de Ureña, de Osuna y de Peñafiel.

ESCUDO DEL DUCADO DE ESCALONA:

Escudo del ducado de Escalona. Blasonado: Escudo cuartelado: 1y 4: en campo de plata, dos calderas endentadas en faja de oro y gules, una sobre otra, con tres serpientes de oro saliendo de cada lado de las asas, una hacia dentro y los dos hacia fuero (Pacheco); 2 y 3: en campo de sable una banda de oro, cargado en el centro de un escudete de gules sobrecargado de una cruz floreteada de plata, y en las costadas de nueve cuñas de azur, cinco en el diestro y cuatro en el siniestro; bordura de plata con cinco escudetes de azur cargado cada uno de cinco besantes de plata puestos en aspa (Acuña de Valencia).



Escudo del Ducado de Escalona


EMBLEMA DE LA ORDEN MILITAR DE SANTIAGO

 Emblema de la Orden  
El emblema propio de la Orden Militar de Santiago es la cruz floronada, cargada con cinco veneras de plata (veneras sobre la cruz). La cruz espada era el distintivo usado por los caballeros de la Orden,
La cruz floronada o flordelisada hace referencia a Jesucristo, y las flores de lis representan a la Virgen María.
Las veneras recuerdan la batalla de Clavijo, ganada a los musulmanes en 844. Cuando los cristianos invocaron a Santiago, el apóstol se les apareció ayudándoles a ganar la batalla.
La venera es la concha inferior, casi plana, y más grande que la superior, de La vieira (Pecten Maximus), un molusco atlántico que puede llegar al medio kilo de peso y tener una concha de más de 15 centímetros. Parece ser que los peregrinos jacobeos volvían a sus tierras luciendo las conchas de las vieiras que se zamparon tras concluir su andadura a orillas del mar del Finis Terrae. Era una forma de acreditar su viaje. De esta forma la venera se convirtió en símbolo del peregrino.
leyenda
 Distintivo de los Caballeros de la Orden de Santiago.


José María Rubio Moya