Me han convertido en una vulgar esquirol

No acierto a comprender como tanta gente ha aceptado de un modo tan sumiso que le cuenten que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades y que ahora toca apechugar.

En mi caso soy auxiliar administrativa de la Junta de Andalucía en Jaén, y ganaba 1.040 euros antes del nuevo recorte que nos van a hacer. Pago 375 euros de hipoteca por un piso de 68 metros cuadrados, y para los gastos fijos (luz, agua, transporte para ir al trabajo…) necesito otros 150 euros. Para comer y vestirnos (vivo con mis dos hijos de 9 y 6 años) me quedan 500 euros mal contados, estos días he dado de baja el móvil e internet. Mi madre me regala cada mes la compra de la última semana en el Lidl porque sino sería imposible llegar, porque siempre hay cosas imprevistas, por ejemplo, el mes pasado en el dentista para el más pequeño se me fueron 220 euros (el “ahorro” de seis meses), y pronto vendrá el segundo semestre del IBI que no se cómo voy a pagarlo. Llevo diez años casi en la misma situación y no soporto que me diga nadie que ahora tengo que pagar por haber vivido por encima de lo que ganaba porque jamás lo hice. Recuerdo eso sí, que en una época salía los domingos a tomar una tapa y una caña, y los martes y viernes tomaba café y media tostada con mis compañeras, y que pagué en cuatro veces un viaje de cinco días con mis hijos a Madrid una Semana Santa, vamos, un lujo asiático como quien dice. Y ahora me recortan un 5% el sueldo el gobierno de Andalucía porque dicen que la crisis la tenemos que pagar entre todos, y que tengo que aceptarlo porque sino podría ser peor, que me echarían En mi pueblo esto se llama chantaje. Son unos miserables, me dan asco unos y otros. De todos modos, lo peor que llevo es no poder hacer huelgas porque no puedo asumir el descuento que me hacen en la nómina, necesito cada euro. Jamás pensé que llegaría a esto, a ser una vulgar esquirol. Jaén, mayo de 2012.