El cuerpo de la anciana de 84 años, Aniceta Cifuentes Oria, que había fallecido en el hospital de Marina de Cartagena (Murcia), quedó el pasado sábado olvidado, por empleados familiares, en el depósito de cadáveres del centro sanitario. Mientras tanto el féretro vacío, que debía contener sus restos, era sepultado durante el mediodía en el cementerio de Los Remedios de aquella ciudad.Fue el enterrador, Antonio Rubio, el primero en sospechar que en la ceremonia había un pequeño error cuando advirtió el poco peso en la caja. Sin embargo, uno de los familiares de la anciana no le dio más importancia a la observación, al contestar que "estaba muy delgada".
Dos horas después, la monja sacristana del hospital quedó horrorizada al descubrir el cuerpo de Aniceta Cifuentes, pues creía que se trataba de un cadáver "desconocido".
Noticia publicada en El Pais por ISABEL LLORENS - Murcia - 02/06/1982
No hay comentarios:
Publicar un comentario